Las actualizaciones de tecnología OTA necesitan una arquitectura flexible
Un vehículo permanece estacionado durante la noche en un garaje, inmóvil hasta que su conductor regresa y lo lleva a su próximo viaje. Pero en lugar de solo esperar, este vehículo está ampliando sus capacidades, volviéndose más seguro, aumentando su inteligencia y aprendiendo a realizar funciones tan bien como los vehículos más nuevos que salen de las líneas de ensamblaje ese mismo día.
Las actualizaciones de software con tecnología inalámbrica ( OTA) hacen que esto sea posible. Cuando se integra con la arquitectura del vehículo, la tecnología OTA permite que los fabricantes puedan llevar al siguiente paso la seguridad activa, el infoentretenimiento y otros dominios de sus vehículos, de forma elegante, escalable, de bajo riesgo y rentable, mucho después de que salen de la fábrica.
Una arquitectura diseñada con cálculo centralizado y optimizada para tecnología OTA puede ayudar a garantizar que las actualizaciones de software y firmware se efectúen sin problemas y de forma segura, con la frecuencia que necesite la aplicación, la estrategia de los fabricantes de equipos originales y las preferencias de los consumidores. La tecnología OTA no solo es esencial para fabricar vehículos operados por software, sino que también abre el potencial para nuevos servicios innovadores, nuevas formas de ofrecer características y nuevos modelos de negocios, además de brindar flexibilidad y elasticidad como nunca antes fue posible.
Consulte el documento técnico para descubrir por qué la arquitectura correcta puede marcar la diferencia cuando se trata de OTA.